31 ago 2008

Embriagada de amor, la Luna se cobijo cerquita del Sol, donde mas le gustaba estar.
Mucho tiempo las estrellas celosas quisieron romper el amor que se tenían.
Ninguna imaginaba que serian testigos de la vida...
Y vino Josefina y se poso entre Luna y Sol y desde ahí arriba iluminan mi vida.
Y aun los astros divinos no comprenden los restos de ese amor...de como la Luna todavía quiere al Sol y de como Josefina refleja sus ilusiones.

1 comentario:

mica* dijo...

es un tema de las pelotas : )


yo tmb cabeza de esponja