
Se distrajo con una melodía que brindaba por el nuevo día.
Vio a su alrededor, la sabanas olían a limpio.
Café caliente, día soleado.
Frió.
Lo esperaba su vida común, sus días calcados de anteriores, sus precios y su sonrisa.
Agobiado.
Histérico de planes y poleas que lo tiran debajo del suelo.
Ingenuo.
Justo cuando creyó que todo empeoraría, ella lo enamoro una vez más con su sonrisa.
Y la recordó durante todo el día.
"...Donde te puedo hacer reír y besar hasta morir."
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